La historia de mi relación con el marketing y el Internet

Cuando empecé como consultor de marketing no tenía una página web. Era un lujo tener una. Costaba mucho y no era algo que me interesaba tener. Debería sentirme avergonzado por empezar a confesar algo como esto, pero me siento aliviado cuando digo que eso fue hace 13 años.

Por aquel entonces me divertía escribiendo mis opiniones y uno que otro cuento literario en un blog. Nada de marketing.

Mi aventura con el marketing digital empieza en una oficina de la Av. EEUU muy pequeña donde cabían 3 mesas cada una con su PC y su respectivo asiento.

Renuncié a un trabajo más remunerativo por estar allí ganando 40% menos.

La razón: Uno en la vida no busca dinero, busca estar cómodo.

Y como el dinero sólo es una vía para estarlo, no me importó ganar menos, después de todo era soltero y con muchas ganas de que me paguen por escribir.

Así que esa oficina era todo lo que yo llamaría felicidad. Estaba trabajando para una red de blogs de un tipo con mucha audacia como para vivir de ellos y de la publicidad con Adsense.

¡Increíble! ¿Podía alguien ganar por lo menos 4 mil soles (que era lo que calculaba) de Google?

Caí en la cuenta que de Internet y de marketing por Internet sabía mas bien muy poco.

Primera lección: Los blogs son la clave para cualquiera que estuviera allí y es que los contenidos es lo más importante en Internet.

El principal consejo para una empresa que quiere posicionar su página son los contenidos porque mi querido lector, en Internet lo más importante son los contenidos. Es decir, no es tu empresa, no son tus ofertas, no son los mil años de experiencia, es lo que tienes para decir que los demás no lo dicen.

Nada en Internet tiene mucho sentido si no habrían contenidos. Ya sea en vídeo, audio, texto o infografías, memes, etc, contenidos era una palabra por donde se debería empezar a ver las cosas en Internet.

Adiós a la oficina

Mi segunda gran lección en el marketing digital, fue cuando este audaz bloguer, un día nos reunió para un almuerzo de despedida y nos dijo que cerraría la oficina porque sus blogs habían caído de posiciones en Google.

Esto se traducía en menos tráfico de visitantes a sus blogs y por ende menos clicks sobre los anuncios de adsense que Google le pagaba.

Fue el segundo gran cambio en la web y se llamó Google Panda, un algortimo que los de Google decidieron bautizarlo así. El oso había descalabrado a muchas páginas webs y es así como entendí como un cambio algorítmico podría definir mi situación laboral.

Afortunadamente, mi vinculación con la comunicación social es profesional e hizo que pudiera trabajar un tiempo por mis medios de consultor y periodista hasta que decidí entrar en el negocio de un café recreo que me costó un ojo de la cara (que no es gran cosa en mi economía), pero 10 mil soles llenos de esperanza en convertirse en una red de café temático, se hicieron humo y acabé por cerrarlo y volver al marketing y como era de esperarse, no sería el marketing convencional sino sería digital.

Aquí mi segunda etapa.

Desde entonces y durante más de 4 años ser Community Manager de una empresa de Alojamiento Web, me ha dado la gran ventaja de capacitarme mientras me pagaban. Aplicar el marketing de la mano del gerente comercial me ayudó a actualizar mis conceptos enormemente a un ritmo escandalosamente insano de 12 horas de marketing diario salvo los domingos.

12 horas diarias durante 4 años (17,280 horas) hace que desarrolles conocimiento, técnicas, habilidad de manejo de herramientas y un dolor de espalda que puedes combatirlo con un poco de ejercicio de fin de semana.

Así me he formado. En un momento en el mundo, donde la mayoría de expertos del marketing por Internet se han formado en el campo ya que las universidades y las escuelas en Perú y en la ciudad de Arequipa sólo han visto a Internet como ese bicho del que parece que más entretiene que lo que puede enseñar, no me quedaba otra que aprender de los que ya tenían tiempo estando allí y experimentando y ellos no eran peruanos, sino españoles y estaunidenses.

Los locos de Hubspot, de Moz y de Search Engine Journal han sido una fuente de conocimiento importante y aún lo siguen siendo. La escuela española también me ha aportado tanto en estos años, pero uno puede llamarse consultor, pero en realidad es un eterno aprendiz del marketing digital porque esto como siempre lo he dicho, está vivo y cambia.

Internet tiene vida propia, porque los seres humanos están presentes allí de una manera activa, ya no sólo consumiendo contenido sino, comprando y vendiendo cosas, debatiendo, conociendo gente, emprendiendo negocios o simplemente trasladando su negocio también al mundo virtual.

Créeme cuando te digo que veo ese mismo conocimiento rudimentario, que yo tenía hace 4 años, en muchos empresarios que desean hoy estar en la web. Tienen esos mismos paradigmas del marketing y veo cometiendo errores al no estar actualizados de lo que funciona hoy realmente en Internet.

Estar en una tribuna y mirar cómo la gente se equivoca. da cierta impotencia y ganas de saltar a esa cancha para conducir mejor sus estrategias y que ellos saquen la retribución por lo que hacen justa que están buscando.

Por ello, estoy aquí, si tienes alguna solución en el mercado y no sabes cómo impulsarla, contáctame. Hablemos de tu proyecto que yo sé bien cómo es empezar desde cero y crecer. 

Paul Fuentes
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2 comentarios en “La historia de mi relación con el marketing y el Internet”

    1. Hola Orlando. Es un establecimiento donde puedes tomarte un café y a la vez pedir juegos de mesa, ver películas, o leer. Pasarla bien en tu rato de ocio. Un saludo y gracias por pasarte por el Blog. 🙂

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